
Mi vieja es una de ellas. De vez en cuando le agarra la chiripiorca y se pone muy de mal humor. Y ese mal humor se lo contagia a todos los integrantes de la casa, hasta al bebé.
Hoy, por ejemplo, se levantó re caliente y muy de mal humor, entró a mi dormitorio, me levantó la persiana, me entró toda la luz del día... y nada, me dijo de todo, no viene al caso.
ODIO CUANDO HACE ESO!
Y hoy lo odié más, porque había dormido menos de dos horas :(.
Está re loca... ahora voy a pensar si el domingo la saludo o no.
Desde ya que no tiene regalo, al margen de que estoy en la ruina económica.
1 comentario absurdo:
me mató la foto...jajaja
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